Blockchain y la Identidad digital auto-soberana
Por Marcos Zocaro (FCE-UNLP)
En términos simples, blockchain es un tipo de tecnología de registro distribuida (Distributed Ledger Technology -DLT) y consiste en una base de datos gestionada en forma descentralizada por varios participantes (nodos) distribuidos geográficamente: éstos tienen una copia actualizada y sincronizada de esa misma base de datos. “Blockchain” es “cadena de bloques”: se puede hacer la analogía con un libro, cuyas “hojas” serían el equivalente a los bloques, y en cada hoja se vuelca información y una vez completada la hoja (bloque), ésta pasa a formar parte del libro (blockchain o base de datos) [1].
Actualmente, una de las principales funciones de blockchain es ser la columna vertebral de los criptoactivos [2]. No obstante, dejando de lado este aspecto, ¿cómo podría esta tecnología colaborar con la protección de datos personales y, al mismo tiempo, simplificar la burocracia a la que se debe someter cualquier persona a la hora de realizar determinados trámites? O incluso, ¿cómo podría mejorarles la calidad de vida a personas en situación de vulnerabilidad socioeconómica?
Aquí hace su aparición el concepto de Identidad Digital Auto-Soberana [3], que permite que cada individuo tenga el control total de sus datos personales y decida cómo y con quién compartir la información que se le solicita; por ejemplo, cuando un organismo estatal le requiera que pruebe su identidad o cualquier otro dato personal (desde historial crediticio hasta el listado de vacunación).
Para verlo con un ejemplo muy simple, se puede pensar en el caso de un establecimiento donde se permita el ingreso sólo a mayores de 18 años de edad (discoteca, casino, etc): el administrador del lugar sólo necesitará corroborar que la persona que desea ingresar es mayor de edad, no le sería útil conocer, por ejemplo, su número de DNI. Por lo tanto, la persona no requeriría enseñar su carnet de DNI con todos sus datos (incluso su domicilio) sino que gracias al sistema de Identidad Digital sólo compartiría con el administrador del sitio la credencial que demuestre su mayoría de edad, y ningún otro dato sensible.
Asimismo, toda esta información (desde los datos de identidad hasta vacunas aplicadas o títulos universitarios obtenidos) estará “tokenizada”, es decir, registrada y almacenada en una blockchain (por ejemplo, Ethereum) y la persona la administrará mediante una wallet o billetera personal.
Por ejemplo, un organismo estatal le emite a la persona determinadas credenciales (por ejemplo, su universidad le emite un título digital de graduación) y dicha credencial, junto con muchas otras que emitan otras instituciones, serán registradas en una blockchain y la persona podrá administrarlas gracias a su wallet personal. Al mismo tiempo, las instituciones emisoras de dichas credenciales dejan sobre la blockchain las evidencias criptográficas para que un tercero pueda verificar que dicha credencial es válida [4].
Casos de uso
Ya desde 2017 existen desarrollos de identidad digital auto-soberana en varias regiones del mundo, que van desde desarrollos en la pionera ciudad Zug, en Suiza, hasta la Ciudad de Buenos Aires.
Precisamente, la ciudad de Buenos Aires está desarrollando su propio modelo de identidad digital auto-soberana que planea tener listo para inicios del año 2023 y que tiene el nombre de QuarkID [5] (originalmente conocido como “TangoID”). Según fuentes del gobierno porteño, en un principio alrededor de 300 mil personas contarán con su identidad digital: en sus wallets comenzarán a almacenar credenciales que les sean emitidas por diferentes organismos e instituciones públicas y privadas que participen del proyecto. Estas credenciales estarán registradas en las blockchain utilizadas al efecto y podrán ser verificadas por cualquier usuario.
De esta forma, no sólo se establece una mayor privacidad de la información personal de los ciudadanos, sino que también esta identidad digital puede colaborar con la inclusión socioeconómica de muchos sectores de la sociedad.
En este sentido, existe otro proyecto en Argentina centrado en la ayuda a habitantes de barrios socioeconómicamente vulnerables, conocido como Proyecto DIDI, que es impulsado por la ONG Bitcoin Argentina y cuyos objetivos principales son facilitarles a estas personas el acceso a bienes y servicios de calidad y colaborar con su inclusión financiera.
Mediante DIDI, se busca reducir el fenómeno denominado “penalidad de la pobreza”, consistente en el mayor costo relativo que personas de mayor vulnerabilidad enfrentan para acceder a distintos bienes y servicios y que se encuentra asociado a la existencia de la información imperfecta o asimetría informativa [6]. Por ejemplo, una persona en condiciones de pobreza no posee un historial crediticio comprobable, por lo cual no podría acceder a un crédito bancario para, por ejemplo, iniciar un micro-emprendimiento; o si logra acceder lo haría a una tasa (costo) mucho más elevado que el normal.
De esta forma, proyectos de identidad digital como el de DIDI procuran corregir dicha asimetría informativa permitiendo que el usuario, mediante su identidad digital, posea su historial crediticio con entidades financiera no tradicionales (por ejemplo, instituciones de microcréditos) y que estas credenciales verificables (registradas en una blockchain) sirvan para demostrar su buena conducta crediticia frente a los bancos convencionales. En otras palabras, las instituciones de micro-finanzas o microcréditos son las encargadas (mediante una plataforma destinada a tal efecto) de emitir las credenciales constatando el buen cumplimiento de la persona, quien a su vez podrá presentar dichas credenciales ante cualquier banco tradicional u organismo público, los cuales verificarán las credenciales en la blockchain. Así, la persona podrá demostrar su buen historial crediticio.
De esta forma, cualquier individuo puede ir construyendo su identidad digital, donde consten no sólo sus credenciales de identidad (DNI, registro de conducir, etc) o su historial de vacunación sino, también, su historial crediticio con entidades no tradicionales o cualquier otra información sensible. Y todos estos datos están en poder de la persona y no de terceros.
Palabras finales
La tecnología blockchain abre un abanico de posibilidades de uso enorme más allá de las criptomonedas, y la identidad digital auto-soberana es una de ellas, permitiendo no sólo que mejore la protección de los datos personales sino también permitiendo mejorar la inclusión financiera de ciertos sectores vulnerables de la sociedad.
Notas
[1] Tratamiento fiscal de la minería de criptoactivos en el mundo; Marcos Zocaro (CEAT-FCE-UBA-2022).
[2] https://www.blogeconosp.econo.unlp.edu.ar/2021/12/27/2814/
[3] “The Path to Self-Sovereign Identity” de Christopher Allen (2016)
[4] https://didi.org.ar/aidi-identidad-digital-auto-soberana/
[5] https://quarkid.org/
[6] “Regulación de blockchain e identidad digital en América Latina” (Andrés Chomczyk y otros, BID, 2020)